Próximo partido
Sábado 26 de Septiembre a las 20:00 en la Grela:
Español
C.D. Sarsfield
"Grela 1"
Los jugadores deben estar una hora antes en el campo
Convocatoria
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Lunes:
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Martes:
Entrenamiento a las 20:30
Cambiados en la puerta de la Torre
Miércoles:
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Viernes:
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Domingo:
C.D Sarsfield -Deportivo Ciudad
18:00 en la Torre
Jornada 32: San Cristobal - C.D. Sarsfield
- Detalles
- Publicado el Lunes, 19 Mayo 2014 10:29
Tras 35 minutos de tanteo, al San Cristóbal le cayó un chaparrón justo cuando parecía haber cerrado los caminos hacia su portería. La tempestad de fútbol que desataron los de Rubén en los últimos diez minutos del primer tiempo no fue suficiente para adelantarse en el marcador. Ya sea por falta de precisión en el remate, acierto de Del Río, meta visitante, o por pura mala suerte, la descarga de remates de los blanquicelestes no dio resultado, y el San Cristóbal salió indemne del río plagado de cocodrilos en el que el Sarsfield convirtió Leyma.
El duelo era competido, pero sin excesiva fluidez. Ambos conjuntos ocupaban bien el campo y no regalaban nada a su rival. El Sarsfield, serio atrás, con Caramés comandando a unos concentrados Masche, Peter y Jorge, iba ganando poco a poco terreno a medida que Sari y Yago empezaban a engrasar sus botas. Saá y Dima se ofrecían siempre en las bandas y Cato y Lucho trataban de dar líneas de pase con sus constantes movimientos entre los experimentados zagueros rivales. Un par de escarceos en cada área fueron el preludio del aluvión de fútbol con el que el Sarsfield sacudió al San Cristóbal. Un balón bien peleado arriba por Dima fue el detonante de la primera ocasión. El 17 fue valiente en el salto con Mantiñán, el poderoso capitán blanquinegro, y el balón cayó muerto en los pies de Lucho, que vio el desmarque de Cato y habilitó al 21 con un pase entre los zagueros rivales. Cato dribló con clase a Del Río pero su remate no encontró puerta. Sin apenas tiempo para lamentarse, Yago inició una nueva carga. La zaga le derribó en el balcón del área, pero el 19 se las ingenió para tocar desde el suelo hacia Saá, que vió a Cato. El delantero superó con un recorte seco a su par y sacó un zurdazo que Del Río repelió a córner. Con el San Cristóbal aturdido por el repentino despliegue albiceleste, nuevamente Yago sacó la chistera para dejar a Saá en órbita hacia el gol. El extremo rompió el fuera de juego y se plantó sólo ante Del Río, que le ganó el pulso y repelió su remate. Olió la sangre el Sarsfield y lo siguió intentando. Tras la salida de un córner, Masche agarró el rechace en la frontal y su zurdazo salió a un palmo de la escuadra. En la siguiente jugada, la presión adelantada de los de Rubén dio resultado y Cato interceptó un despeje de Del Río, se acomodó para su derecha, y disparó con dureza. El portero no blocó y al rechace acudió Lucho, pero su remate se fue sobre el larguero justo cuando García Gómez señalaba el camino a los vestuarios.
Después de anotar en sus dos anteriores partidos, no necesitó el San Cristóbal recurrir a su mejor versión para superar al Sarsfield en la reanudación, detalle que pone el foco sobre las imprecisiones del equipo albiceleste, que penó su falta de puntería en la primera mitad, cuando pudo liquidar el choque, en una segunda mitad en la que fue de desastre en desastre. A los 5 minutos, Tobío ya le había marcado el primero. Un despiste al permitir el saque rápido de una falta en medio campo permitió la internada por la derecha de un extremo visitante, que centró atrás para que el ex del Calasanz fusilase a Sergio.
En el 55, Rubén tiró de banquillo y Ansede y Mora sustituyeron a Saá y Lucho. Pero en el 66, Liñares superó a Sergio y puso el partido en bandeja para el San Cristóbal, una descarga que le dolió al Sarsfield porque estuvo precedida de un codazo de Tobío a Cato no señalado por el colegiado. Los blanquinegros jugarían con uno más al tener que abandonar el campo Cato con una fuerte contusión ocular.
Con más de 20 minutos por delante por debajo en el marcador y en inferioridad numérica, el Sarsfield trató de no bajar los brazos ante un San Cristóbal que cazó el tercero en el 73, cuando Tobío hacía su segundo gol de la tarde. A la desesperada, con más corazón que cabeza, el Sarsfield trataba de buscar la potencia del recién incorporado Mora, la velocidad de Dima y la frescura en el regate de Ansede, pero el gol no llegó.
Tras paladear la consecución del objetivo de la permanencia hace unas jornadas, el repentino temor a una cascada de descensos por arrastre en cadena empuja al Sarsfield a no bajar la guardia en los dos partidos que restan por disputar. Sólo un inmerecido cataclismo podría llevar a los de Rubén a recurrir a la foto finish.